martes, 8 de septiembre de 2015

Pastel de patatas y manzana al horno con queso de Mahón


La semana pasada estuve en el mercado sabatino de productos del campo de Villafranca del Penedés donde compro frutas, verduras, y hortalizas directamente del payés. Ahí es donde adquirí los caracoles del post de hace unos días, unos tomates muy sabrosos "de colgar", que son ideales para hacer el pan con tomate, y unas patatas tipo kennebec que hoy he utilizado junto a un trozo de queso de Mahón que ya se estaba poniendo un poco seco.

El caso es que revisando las recetas he comprobado que ya hay algunos pasteles de patata en el blog. No me había percatado de que me gustaban tanto. Sin embargo este es distinto a otros. Sabrosísimo. fácil, asequible (se puede hacer con un queso cualquiera) y se puede llevar a cualquier parte que nos convenga, lo mismo que si fuera una tortilla.

Tengo que decir que para hacer este tipo de plato me gusta utilizar la patata francesa porque tarda un poco menos en cocer. Pero hay que reconocer que la patata kennebec se deshace menos y el pastel queda con mejor presentación.


 Los cálculos los he hecho para emplear como guarnición para carne a la plancha, o como plato único, acompañado de unas judías verdes o guisantes salteados con jamón:

Ingredientes para 4/5 personas

400 g de patatas kennebec
200 g de queso (trozos que os hayan sobrado)
300 ml de crema de leche + 100/150 ml de leche 
2 manzanas harinosas
Nuez moscada
Sal (opcional)


Encender el horno a 200º

Untar con un poco de aceite un recipiente para horno. Quitar el exceso.

Cortar las patatas y las manzanas muy finas y distribuir en capas alternando patata y manzana, terminando con una de patata. Dejar un pequeño borde alrededor de la bandeja para que pueda entrar con facilidad la crema de queso.

Rallar o cortar a trozos pequeños el queso (yo lo he troceado porque me gusta encontrar tropezones). En un cazo diluir la crema de leche con el queso, a fuego muy suave, hasta que se forme una crema ligera. Si espesa mucho añadir un poco de leche caliente.

Condimentar con nuez moscada y sal, solo si hace falta. El queso de Mahón ya es fuerte de por si y no he necesitado añadir más.

Cocinar en el horno tapado por espacio de unos 45/60 minutos. Dependiendo del tipo de patata.
Si el tiempo se alarga más de 45 minutos es conveniente bajar el horno a 180º, y continuar la cocción hasta que la patata esté tierna.

Si preferís rallar el queso, cinco minutos antes de sacar la bandeja del horno gratinar por encima con un poco de queso rallado.

Los últimos minutos hay que estar muy pendientes para que no se queme.

Qué lo disfrutéis!..


2 comentarios:

  1. Una combinación exquisita de sabores, la manzana ha de darle un sabor muy rico y en cuanto al queso, con lo quesera que soy me tiene que gustar.
    Besos guapetona.

    ResponderEliminar
  2. Hola, pues no se me había ocurrido mezclar patatas y manzanas, debe estar muy rica esta tarta!!un beso

    ResponderEliminar

Gracias por vuestros comentarios y observaciones. Todos y cada uno de ellos son bien recibidos, y tenidos en cuenta. Gracias también por tener la generosidad de transmitir a través de vuestros blogs todos esos conocimientos que me han sido tan útiles para mejorar, y seguir aprendiendo.
También mi más sincero agradecimiento a todos esos anónimos aficionados a la cocina que dedican parte de su tiempo a ver mis recetas. Espero que la visita les pueda ser de utilidad.
Un beso, y un abrazo grande a todos.