Menudo año de setas estamos teniendo, a este paso vamos a poder degustarlas hasta Navidad.
Antes de cocinar los níscalos hay que limpiarlos por ambos lados con un pincel fino, para quitarles la tierra y el musgo. Por lo general es suficiente con eso pero si veis que necesitan más, limpiar con un paño de cocina humedecido en agua.
A continuación cortar el tallo a ras para ver si tienen algún parásito. Si la carne está limpia están listos para cocinar. Si la carne presenta pequeñas cavernas tenéis que valorar si os sale a cuenta usarlos o no. Todo dependerá de la cantidad de invasores. Se pueden trocear las setas e ir retirando las zonas afectadas si no hay muchos habitantes. Si la carne está plagada de ellos es preferible desecharlos. Puede que hasta tengan mal sabor.
Llegado a este punto, yo suelo trocear los grandes y dejar enteros los más pequeños. Por suerte no me ha salido ninguno malo.
Antes de cocinar los níscalos hay que limpiarlos por ambos lados con un pincel fino, para quitarles la tierra y el musgo. Por lo general es suficiente con eso pero si veis que necesitan más, limpiar con un paño de cocina humedecido en agua.
A continuación cortar el tallo a ras para ver si tienen algún parásito. Si la carne está limpia están listos para cocinar. Si la carne presenta pequeñas cavernas tenéis que valorar si os sale a cuenta usarlos o no. Todo dependerá de la cantidad de invasores. Se pueden trocear las setas e ir retirando las zonas afectadas si no hay muchos habitantes. Si la carne está plagada de ellos es preferible desecharlos. Puede que hasta tengan mal sabor.
Llegado a este punto, yo suelo trocear los grandes y dejar enteros los más pequeños. Por suerte no me ha salido ninguno malo.
Ingredientes
Rovellones frescos
Algún diente de ajo
Perejil fresco
Tomillo fresco
Aceite de oliva
Sal marina o sal Maldón
Trocear los rovellones.
Picar ajo y perejil.
Calentar una sartén o plancha amplia sin nada de aceite. Cuando esté caliente pincelar con aceite de oliva y sofreír ligeramente el tomillo. Retirar.
Pincelar las setas con aceite. Echarlos de golpe en la sartén. Saltear continuamente con la ayuda de dos espátulas hasta que estén cocinados al dente.
Antes de retirar del fuego añadir un chorrito de aceite de oliva, la picada de ajo y perejil y la sal marina. Si usáis sal Maldón, condimentar en el propio plato de servir.
Otras cositas: A veces los hago solo con tomillo.
Aquí tenéis un enlace a una ensalada de setas.
¡Qué aproveche!
Qué rabia cuando las setas vienen con "habitantes".
ResponderEliminarCon tomillo no los he hecho, solo ajo y perejil. pero ahora que lo pienso el tomillo les ha de dar más sabor aún.
Besos.