viernes, 2 de diciembre de 2016

Tortellini con setas gratinado al horno




Andaba rebuscando en la despensa para tener memorizados todos los ingredientes que podría usar para los menús de las próximas fiestas cuando encontré un paquete de ceps secos que compré hace unos meses en previsión a lo que se me ocurriera hacer. Yo soy así, adquiero lo que me gusta y "ya pensaré luego lo que hago con ello".


La pasta fresca me encanta. La suelo cocinar de manera muy sencilla, muchísimas veces solo con un sofrito de cebolla y calabacín, tal y como os enseño aquí. También le añado mucho queso rallado, mucho... ¡Me encanta!. Con frecuencia utilizo el de tipo Parmesano, el que viene en un taco. Tampoco me puede faltar un toque de pimienta negra de molinillo, se lo pongo a casi todo.

En la elaboración de los tortellini de hoy he empleado setas y beicon ahumado. No se necesita mucha cantidad pero los dos suman bastante a la hora de obtener un resultado apetecible. Si puede ser no prescindáis de esos ingredientes porque la pasta "gruesa" necesita sabor para que no resulte sosa.


Ingredientes para cuatro personas

1 paquete de 250 g tortellini de espinacas elaborados con pasta fresca (de dos raciones)
3 lonchas algo gruesas de beicon ahumado
1 calabacín pequeño
1 cebolla mediana
75 g de ceps deshidratados
Un chorrito de vino blanco de mesa (joven)
Aceite de oliva
Hierbas provenzales picadas
Pimienta blanca
Sal


Para la bechamel y el gratinado

700 ml de leche
2 cucharadas colmadas de harina de trigo
50 g de mantequilla
Nuez moscada rallada
Queso parmesano en polvo
Queso para gratinar 
Sal



- Una hora antes, poner a hidratar las setas cubiertas de agua del tiempo. Escurrir bien apretándolas con las manos justo antes de su utilización.

- Cortar la cebolla en brunoise.

- Cortar el calabacín y el beicon ahumado a tacos pequeños.

- En una sartén sofreír a fuego lento la cebolla, con un poco de aceite de oliva, hasta que empiece a coger un color dorado. Añadir el beicon, el calabacín y los ceps todo junto. Subir el fuego y saltear unos instantes. Verter el vino y cocinar a fuego lento hasta que se evapore todo el alcohol. Condimentar con sal, pimienta blanca y hierbas provenzales.

- Cocer la pasta fresca en abundante agua hirviendo con sal el tiempo que os indique el fabricante. Escurrir la pasta y colocadla plana, formando una sola capa, en una bandeja para horno. Procurar que no sobre espacio por ningún lado, de ese modo será más fácil cogerla para servir.

Para que la pasta fresca rellena no se os deshaga, una vez haya arrancado el hervor bajar a fuego medio y tapar el recipiente un poco. Dejando una abertura en la tapa de la olla podéis controlar la intensidad con que hierve el agua, que debe ser suave. Hay que apagar el fuego un minuto o dos antes de que finalice el tiempo de cocción, de ese modo se terminarán de hacer con el propio calor.

- Con una cuchara distribuir el sofrito por encima de los tortellini.

Bechamel.-

- Poner a hervir la leche ya medida. 

En este caso necesitamos una bechamel clarita, por eso tengo que insistir en que no os paséis de harina. Si osquedara algo líquida en el horno terminará de evaporar lo que sobre. Recordar que al enfriar también cuaja.

- A fuego lento derretir la mantequilla al mismo tiempo que añadís dos cucharadas colmadas (sin pasarse) de harina. Remover la mezcla con unas varillas encima del fuego muy bajito hasta que empiece a hervir. Debemos dejar que la harina se cocine dos o tres segundos en la grasa antes de verter la leche caliente.

- Sin dejar de remover echar poco a poco la leche caliente. A fuego lento seguir removiendo. Después de que la mezcla espese, hervir dos minutos más y la bechamel estará lista. Antes de que enfríe condimentar con sal y nuez moscada rallada.

- Verter la bechamel sobre los tortellinis. Distribuir por encima una capa fina de queso parmesano en polvo. A continuación otra de queso rallado para gratinar.

- Calentar el horno a 200º. Cocinar hasta que veáis que la capa de encima está dorada. Mejor usar el grill en los últimos minutos, cuando el queso esté derretido del todo.

Muy importante, para gratinar es mejor introducir la bandeja en el horno cuando éste todavía no haya alcanzado una temperatura alta porque el queso no se derretirá sino que se tostará directamente y no conseguiréis que se deshaga convenientemente.

¡Qué aproveche!


3 comentarios:

  1. Comprar un ingrediente y pensar "ya se me ocurrirá algo" eso es creatividad.
    No tengo palabras para este plato porque lo que tengo es hambre, jejeje y es que lo iba leyendo y ya me lo imaginaba en mi mesa, tan rico...
    Besos.

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  2. A mi también me ocurre eso de comprar algo sin tener muy claro qué hacer y dejar que la creatividad me acompañe en el momento de cocinarlo , aunque a veces , se me queda olvidado en la despensa y me cabreo por el olvido cuando veo que ya se ha pasado de fecha jaja...
    En casa no somos de consumir habitualmente pasta , pero sí de vez en cuando y esta receta que nos compartes me parece buenísima Alba .
    Un abrazo.

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  3. Muy buena recomendación la del horno precalentado para gratinar. Este plato tiene que saber a gloria. Buenísimo.

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Gracias por vuestros comentarios y observaciones. Todos y cada uno de ellos son bien recibidos, y tenidos en cuenta. Gracias también por tener la generosidad de transmitir a través de vuestros blogs todos esos conocimientos que me han sido tan útiles para mejorar, y seguir aprendiendo.
También mi más sincero agradecimiento a todos esos anónimos aficionados a la cocina que dedican parte de su tiempo a ver mis recetas. Espero que la visita les pueda ser de utilidad.
Un beso, y un abrazo grande a todos.