No sé muy bien si fueron los sobaos pasiegos los que me inspiraron este mini pastel o el hecho de que me cuesta un montón ponerme a hacer repostería; quizá sean las dos cosas juntas. La cuestión es que cuando los probé y vi que era lo que yo andaba buscando hacia tiempo, en cuanto a calidad y poca cantidad de azúcar se refiere, tardé menos que nada a ponerme manos a la obra.
La de vueltas que he dado para decir que es un postre ideal para vagas, jeje!.. (Con perdón)
Los sobaos los compre en una tienda donde venden dulces artesanos, pero en alguna gran superficie se pueden encontrar los de DO que también nos sirven. Los industriales, por lo general, son demasiado dulces, y no me sirven como base, si posteriormente los quiero rellenar con otros ingredientes como puede ser chocolate, crema, o nata azucarada.
No sé si se puede apreciar en la fotografía, pero en este caso el bizcocho es tan tierno y liviano que se deshace en el paladar. Y eso era precisamente lo que yo quería.
No sé si se puede apreciar en la fotografía, pero en este caso el bizcocho es tan tierno y liviano que se deshace en el paladar. Y eso era precisamente lo que yo quería.
Para hacerlos se necesita: Sobaos pasiegos (2 por persona)
Fresones en su punto de maduración
Ron
Leche
Azúcar glass
Nata montada azucarada ( puede se de la congelada)
Mantequilla
Aro de cocina
Observaciones:
En la fotografía que ilustra la receta he utilizado fresones que tenía cortados y macerados solo con azúcar de un día para otro, pero podéis usarlos al natural siempre que estén maduros y sean dulces.
En el collage de fotografías que podéis ver al final de la receta, los fresones son naturales y cortados a rodajas. En esta ocasión cambie la forma de usar la fruta porque ésta si era lo suficientemente dulce.
He empleado leche y ron para mojar ligeramente el bizcocho, pero se puede usar el mismo jugo/almíbar de la fruta macerada.
En el collage de fotografías que podéis ver al final de la receta, los fresones son naturales y cortados a rodajas. En esta ocasión cambie la forma de usar la fruta porque ésta si era lo suficientemente dulce.
He empleado leche y ron para mojar ligeramente el bizcocho, pero se puede usar el mismo jugo/almíbar de la fruta macerada.
La nata debe descongelarse en la nevera de manera natural. Cada vez que la uséis volver a introducir en la nevera hasta que la volváis a necesitar. Si no lo hacéis así se os desmontará debido a la temperatura ambiente.
Dicho esto, proseguimos con la receta.
Dicho esto, proseguimos con la receta.
En dos dedos de leche mezclar una cucharada de ron.
Untar el interior del aro con mantequilla.
Dar forma redondeada al primer sobao, con la parte más tostada abajo, poniendo el aro encima y presionando suavemente. Reservar.
Dar forma redondeada al primer sobao, con la parte más tostada abajo, poniendo el aro encima y presionando suavemente. Reservar.
Hacer lo mismo con el segundo y dejar éste dentro del molde (la parte tostada abajo)
Echar unas cucharaditas de leche con ron por toda la superficie del bizcocho. Hay que ser moderad@s o el bizcocho se desharía. (Leer las indicaciones que os pongo abajo, en rojo.
Poner la primera capa de nata, cuatro cucharadas colmadas de las de café serán suficientes. Extender uniformemente, sin presionar, y a continuación distribuir por encima una capa de fresas sin dejar huecos. Seguidamente extender por encima otra capa de nata.
Dar la vuelta a la tapa del sobao reservado y mojar con moderación el bizcocho. Colocar encima la tapa sin presionar mucho (la parte tostada arriba) y ya podemos quitar el aro con cuidado. Mejor sujetar con un dedo la tapa mientras quitáis el aro.
Según se vayan haciendo, coger por abajo con una pala ancha y colocar los pastelitos en una bandeja que quepa en la nevera. Cuando los tengáis todos listos tapar con un papel film sin presionar y dejar reposar.
¡Se puede congelar!
¡Se puede congelar!
Como os he comentado la capa de abajo del pastelito debe ir con la parte tostada hacia abajo. El hecho de que veías en el medio el bizcocho marrón es porque el sobao es cuadrado y el aro es redondo y el diámetro que he utilizado me venía justo para cortar; por un lado me sobraba sobao y por otro me faltaba. Así que lo que he hecho es recolocar el bizcocho y donde faltaba he puesto lo cortado. Es fácil de adaptar si se presiona un poco la base. Si usáis un molde más pequeño que el sobado no tendréis ese problema.
Arriba no he podido hacer lo mismo porque la tapa queda en el aire, casi fuera del aro, por eso no se ve redondo del todo. Es recomendable hacer una de prueba primero para que veáis las posibles dificultades y las tengáis previstas de antemano.
¡Y a disfrutar!
Ha quedado perfecto tu pastel express!! me encanta!! además que al ser pequeño, no tenemos la tentación de ir a por más jajaja,
ResponderEliminarMe ha encantado!
Tiene que ser una delicia y vaya bonito que queda...para no poder resistirse. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminarQue belleza....ha quedado de revista!....y sin duda estaba delicioso!!......Alba puse el enlace de donde saque la receta de pastel, yo creo que queda mejor con manteca de cerdo, pero aca no encuentro.....es super delicioso, pero debes usar un buen queso....y dependiendo de la humedad del queso es la harina que lleva el relleno.....una amiga lo hizo y termino usando mas harina.....tu pastel me tento ahora que hay fresas!.......Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarWow me ha encantado y me viene de maravilla. En casa somos poquito de dulces, pero unas fresas (con yogur, en lugar de nata) siempre nos gustan. Con los sobaos de base me has dado un idea genial, porque es un bocado pequeño y parece un postre muy "de fiesta". Me lo llevo :)
ResponderEliminarBesos bonita.
La verdad es que a veces apetece algún capricho dulce así de rápido, menuda tentación nos traes hoy porque si que se ve muy esponjoso y rico, difícil decir que no a un pastelito así. Delicioso y bonito con esos trozos de fresa asomando para que los veamos bien.
ResponderEliminarBesos.
Un pastel de lujo, de los que se ven en las mejores pastelerías!!un beso
ResponderEliminarA mi me encanta utilizar los sobaos también o bizcochos de soletilla en estos postres mini, adelantan trabajo y quedan super bien para darnos un capricho o agasajar a nuestra gente querida.
ResponderEliminarY fíjate que se me ha apetecido jaja....no tengo remedio......
Besinos.
Te han quedado de lujo y verás como cuando los repitas (que por la pinta que tienen, seguro que lo haces), te quedarán totalmente perfectos en cuanto a estética se refiere ( y porque lo dices tu, que yo no he notado nada en la foto), porque de sabor... no dudo que deben ser una delicia!
ResponderEliminarUn besazo
para vagos pero bien bueno, me encantan las fresas, la nata y los sobaos, te ha quedo estupendo y la presentación de diez
ResponderEliminarun besazo guapa
Ummm que delicia¡¡¡ y que bonita presentacion, besos
ResponderEliminarQue delicia de postre y con esa presentacion entra por los ojos y creo que nadie se puede resistir de hincarle el diente
ResponderEliminarbesinos
Te mande un correo con la informacion....Abrazotes, Marcela
ResponderEliminarSi es para vagos me va genial, preciosa presentación!!
ResponderEliminarUn beso
Un gâteau bien gourmand. Il me plait.
ResponderEliminarA bientôt